No solo los consumidores, sino también las empresas han debido afrontar una creciente inflación durante los últimos meses. Los precios de las materias primas y de la energía aumentan constantemente y la producción también se encarece. Esto tiene un impacto directo en el facturado, porque el aumento de los costes no siempre se puede transferir al usuario final uno a uno, y el aumento de los precios en las estanterías de los supermercados también puede conducir a una disminución del consumo de cerveza. Esto hace que sea aún más importante para las empresas, especialmente en tiempos como estos, conocer los indicadores clave de rendimiento (KPI) de sus instalaciones y poderlos comparar con el índice de referencia estándar del sector. Esta es la única manera de garantizar que los costes de producción se mantengan en un rango óptimo.
La creciente presión sobre los precios hace cada vez más importante una producción eficiente
Pero no es solo debido al aumento de los precios de la energía y las materias primas que hace sentido examinar más de cerca la producción y sus procesos. Hay muchos momentos oportunos para una revisión, por ejemplo, cuando se acumulan fallos mecánicos o eléctricos de instalaciones individuales, cuando hay cambios en los procesos de trabajo o en las responsabilidades del personal o cuando las calidades fluctuantes de las materias primas se reflejan en una reducción de la producción. Por lo tanto, vale la pena realizar un análisis exacto de los equipos existentes por muchas razones; porque siempre es posible encontrar puntos de ajuste que hacen posible aumentar la eficiencia y el rendimiento. El Steinecker Service Team puede proporcionar un apoyo valioso para este análisis con su amplia experiencia.